Santiago de Chile, respiraba un aire distinto la mañana de primer sábado de abril. Cientos de personas - lugareñas y extranjeras - comenzaban a llegar cerca de las 11 a los dos accesos de Parque O'Higgins y sus alrededores. La mezcla de acentos, lenguas, colores y nacionalidades servirían como preámbulo de lo que se viviría poco más tarde con la variedad de sonidos musicales. Ansiedad, nervios y emoción eran parte de esa previa que rondaba la realización del primer Lollapalooza en Sudamérica, un afamado festival norteamericano de verano  que debutó como un evento itinerante en 1991 y que desde 2005 se realiza únicamente en el Parque Grant de Chicago, Illinois.

Luego de una extensa espera para retirar los abonos comprados via web - uno de contados errores organizativos - nos esperaban las más de 70 hectáreas que servirían para recibir a cerca de 50 mil personas diarias. Cinco escenarios - tres abiertos y dos techados - harían de plataforma para  los 30 actos por jornada que presentaron su música. Un patio de comidas, una zona de picnic, especios ecológicos y zonas de descanso completaban el terreno que no tiene nada que envidiar a los más grandes festivales del mundo.

Foto Cortesía: Javier Valenzuela (rocknvivo.com)


Un público mayoritariamente juvenil, convivía con niños - sí, pequeños desde los 3 ó 4 años en compañia de sus padres - y adultos en un ambiente de fiesta que estuvo marcado por la paz y el respeto (alcohol y drogas recreativas no estuvieron ausentes entre grupos de asistentes, pero creemos sin excesos notorios) y que no sobrepasó ningún tipo de límite durante los dos días. El espacioso recinto, invitaba a ser caminado por doquier - existía un tiempo cercano a los 15 minutos entre un extremo y otro - y la programación de bandas fue cumplida casi a cabalidad, siendo el Tech Stage (La Cúpula; el más pequeño y lejano de los escenarios) la gran excepción.

La enorme cantidad de bandas, el prolongado horario - 11 horas, de 12:00 a 23:00 - y la sobreposición de presentaciones - hasta cuatro en simultáneo - hicieron imposible disfrutar todo y a través de dos posts, intentaremos transmitirte un poco de los shows que pudimos observar.



LOS BUNKERS

Foto Cortesía: terra.cl
La banda de Concepción, llegaba al 2do escenario (muy similar al principal y casi lado a lado) como la mayor propuesta del rock de Chile. El quinteto, basado en su sonido setentero, casi beatlesco y rozando la Nueva Canción Chilena, sonó preciso en escenario y no defraudó a los miles de seguidores que resistían el fuerte sol de mediodía. Canciones como "No me hables de sufrir", "Las cosas que cambié y dejé por ti", "Canción para mañana", "Miño" y "Llueve sobre la ciudad" se intercalaron con unos cuantos temas de Silvio Rodriguez que fueron incluídos en Música Libre, el más reciente disco de los Bunkers.


STEEL PULSE

Foto Cortesía: Javier Valenzuela (rocknvivo.com)
Los veteranos ingleses brindaron una hora de reggae al mejor estilo de la vieja escuela, teniendo como uno de sus puntos más altos, ese tema de 1984 llamado "Steppin' out". La decena de integrantes basó su música en su historial de 11 discos - en 30 y pico de años - y llegó a ese escenario luego de la performance de la chilena Francisca Valenzuela.



CYPRESS HILL

Foto Cortesía: Javier Valenzuela (rocknvivo.com) 
Los latino californianos siguieron a continuación con algo más de una hora de hip hop y harcore rap. Los ritmos percusivos y algunas letras en español se mezclaron con sus éxitos más grandes como "Insane in the brain", "Tequila sunrise", "How I could just kill a man" y su acercamiento al rock con "Superstar".


JAMES

Foto Cortesía: Javier Valenzuela (rocknvivo.com)
Otra banda veterana hacía su primera aparición en tierras sudamericanas. Los ingleses James marcaron uno de los puntos altos del día con un show de una hora que incluyó temas reconocidos como "Laid", "Tomorrow" y "Said something", todos de la década del 90, además de unas cuantas canciones de los mini-álbumes del año pasado. Tim Booth y los suyos sonaron muy bien y lograron conectarse con la gente rápidamente.



BEN HARPER


Foto Cortesía: Javier Valenzuela (rocknvivo.com)
Una de las performances que personalmente me dejó más satisfecho fue la del californiano Ben Harper. Sentado haciendo vibrar su Weissenborn (lap steel hawaiana), demostró de entrada sus dotes como guitarrista y cantante, recordando a grandes como Jimi Hendrix y Ray Charles. La mezcla de blues, soul, rock, funk y gospel, se sintió a lo largo de los 60 minutos en los que estuvo en el escenario. Sus músicos estaban a la talla, pero sin duda la figura descollante fue propio Harper que técnicamente quedó como uno de los mejores de todo el Lollapalooza. Reconozco que me quedé esperando "With my own two hands", pero su set no decayó en ningún instante e incluso tocó un tema de su próximo álbum Give till it's gone, la pettyesca "Rock and roll is free".    


THE NATIONAL

Foto Cortesía: Javier Valenzuela (rocknvivo.com)
Con un cantante barítono que a momentos recuerda a Ian Curtis, estos favoritos del indie llegaban con los laureles brindados por High Violet, su quinto disco en estudio. Si bien era mucha la expectativa que tenía con ésta banda, alcancé a aburrirme rápidamente y considero que sería más interesante tenerlos en un show pequeño e íntimo que dentro del marco de un festival. Temas como "Bloodbuzz ohio", "Conversation 16" y "Apartment story" superaron el promedio.


DEFTONES

Foto Cortesía: Javier Valenzuela (rocknvivo.com)

Los sobrevivientes noventeros, llegaban a Lollapalooza como parte de una gira que los traía por cuarta vez a Sudamérica, aunque en ésta ocasión lo hacía sin el bajista Chi Cheng quien lentamente se recupera del accidente sufrido en noviembre de 2008. Los californianos, tomaron el 2do escenario cuando caía la noche y deleitaron al nutrido público con un enérgico show de 90 minutos que arrancó con dos temas del reciente Diamond Eyes para luego viajar a los orígenes con canciones de Adrenaline y Around The Fur. Demostrando estar en buena forma, Chino Moreno y los suyos, se guardaron para el final grandes himnos como "Change" y "Back to School".

EMPIRE OF THE SUN

Foto: Pato Peters
El dúo australiano que se convirtió en una de las revelaciones del electro-pop/rock desde su aparición a finales de 2008, venía al Lollapalooza luego de su participación en el festival norteamericano en 2010 y visitaba America Latina por segunda vez, habiendo estado en el SWU de Sao Paulo el año pasado. Con únicamente Luke Steel al mando - Nick Littlemore, la otra parte del proyecto, está dedicado a otras tareas musicales, como el Cirque du Soleil en Nueva York - el show fue uno de los más vistosos y coloridos, con variadas coreografías y distintivos vestuarios que llevaron la función a otro nivel. Arrancando con "Standing on the shore", Steele - que me recordó mucho a Prince en escenario - comandó perfectamente a los suyos a través de las canciones de Walking on a dream, su gran disco debut, guardando para el final la canción que da nombre al álbum. Aún suenan en mi cabeza "Half mast", "Without you" y la excelente "We are the people" con coreografía a la Robert Palmer y todo.

THE KILLERS

 
Foto Cortesía: Javier Valenzuela (rocknvivo.com)

La banda era uno de los nombres más grandes del festival, por no decir el más grande, y su cita con el día uno traía a Brandon Flowers, Dave Keuning, Mark Stoermer y Ronnie Vannucci Jr juntándose luego de un año de inactividad (tuvieron dos tocadas pequeñas en 2010 en los Estados Unidos y una función tipo ensayo público dos días antes del festival en el escenario más pequeño del Lollapalooza). Personalmente, era el acto que más quería ver y no salí para nada defraudado, pese a lo breve del show (hora y 20 minutos, cuando el programa los anunciaba con dos horas en escena). A lo largo de 16 canciones, el cuarteto de Las Vegas se paseó por sus tres álbumes y visitó también el disco de lados B, y arrancó bien arriba con la contagiosa "Spaceman", para luego alternar entre discos y tocar absolutamente todos los sencillos oficiales. La gran masa humana acompañó vocalmente en canciones como "Somebody told me", "Bones", "For reasons unknown", "Human", "Mr.Brightside" y "When you were young" y guardó algo de silencio - imagino que por desconocer la letra, no el tema en sí - en otros hits como "All these things that I've done" y "A dustland fairytale". Los Killers estuvieron en el Lollapalooza, dejaron muy en claro porque eran los headliners del día y les restan tres fechas juntos, antes de dar paso a la gira en solitario de Brandon Flowers que lo tendrá tocando en renombrados festivales europeos.

Cortesia: La Tercera EFE

Por razones mencionadas arriba, no pudimos ver todo y quedamos con las ganas de presenciar los shows de Edward Sharpe & The Magnetic Zeros, Datarock, Css y Fatboy Slim.

La realización de este mega evento, abriga las chances de tener en America Latina - y en un futuro no muy lejano -  a bandas como Arcade Fire, The Black Keys, The Strokes, Spoon, Wolfmother, MGMT, Cut Copy, Mumford & Sons, The Big Pink, Against Me!, Switchfoot, The Morning Benders, Warpaint, The Temper Trap y Neon Trees, todas confirmadas para la edición norteamericana de agosto de este año.

El Lollapalooza ya está acá y es nuestro...



Pato Peters


PD: Para leer la reseña del día dos a cargo de Eze Escobar, dale click acá

2 comments:

  1. Mucho carrete, mucho nivel. Fue una de las mejores experiencias de mi vida y si bien no conocia a todos los artistas, lo pase como nunca. Los chilenos mereciamos algo asi y debemos cuidarlo para tenerlo por siempre.

    Gracias por tu nota y felicidades por la web.

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  2. MALDITA SEA¡
    ME PERDI EL LOLLAPALOZA
    ME PERDI DE BANDAS COMO LOS BUNKERS DEFTONS THE KILLERS ENTRE OTROS.
    SALUDOS PATO
    MALDITO SUERTUDO JEJEJE
    ATTE: RICHARD MAIDANA

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