La segunda jornada del festival prometía, y mucho, sobre todo por el acto principal, los Foo Fighters. Sin embargo, para poder verlos, había que esperar y la espera, no pudo empezar de mejor manera de la mano de la chilena Camila Moreno. Ella trajo todo su sonido indie en un escenario lleno de colores, donde presentó sus discos: Almismotiempo y Opmeitomsimla. Y donde también, en un momento dado, ella y toda su banda, lanzaron globos de agua al público, lo cual desató una verdadera fiesta. Una artista joven, a la cual vale la pena seguirle los pasos.
Seguidamente llegó la hora de uno de los platos fuertes, y por lo menos, uno de los grupos mas esperados por mí: Foster The People. Los californianos hicieron bailar al público, como ningún otro artista en este Lollapalooza. Tocaron íntegramente su disco debut Torches y demostraron que son una banda que llegó para quedarse. De la mano de Mark Foster, regalaron al público hits radiales como “Helena’s Beat”, “Call it what you want” y “Don’t Stop”. Todos coreados por la gente, sin duda merecían estar mucho más alto en la grilla de artistas. El cierre, con el ya clásico “Pumped Up Kicks”, marcó uno de las mejores presentaciones de la jornada.
Friendly Fires y su dance punk continuó con la movida fiestera que se vivía en Lollapalooza, de la mano de canciones pertenecientes a su disco homónimo y al más reciente Pala. No faltaron temas como “Jump in the Pool” y “Hawaiian Air”.
Otro de los grupos esperados, fueron los originarios de Seattle: Band of Horses, que trajeron toda la belleza de sus canciones y que lograron conectarse de forma especial con el público. Desde el inicio, con “The First Song” hasta el clásico, perteneciente a Everything All The Time, “The Funeral” emocionaron al público. Con un Bred Bridwell, que cautiva con su tono de voz, en canciones como: “Laredo” y “Is There a Ghost”. Lamentablemente el poco tiempo que duró el show, les permitió tocar una sola canción de su más reciente albúm Infinite Arms. Band of Horses es, sin duda, una de las más interesantes bandas de los últimos años.
TV on the Radio se encargó de continuar con la jornada, presentando canciones de Nine Types of Light y repasando todos sus álbumes. Una banda originaria de Brooklyn, que fusiona elementos de rock, soul y jazz con condimentos de electrónica. Canciones como “Will Do”, “Red Dress” y “Wolf Like Me” fueron interpretadas por esta banda de extraordinarios músicos, en las cuales, los metales se destacan. Si bien creo que Band of Horses y Foster The People, tuvieron mayor recepción que los neoyorkinos.
Sin duda, la cuota de rock la traería Foo Fighters, pero Joan Jett and the Blackhearts fueron los que nos dieron el primer momento rockero del día. De la mano de verdaderos clásicos como “I Love Rock n’ Roll”, “I Hate Myself For Loving You” y “Bad Reputation”, mostraron en la excelente forma que se encuentra Joan Jett, ícono indiscutible del hard rock y una de las mejores guitarritas que existen. Sin embargo, creo que en cierto punto, desentonó con el resto del lineup, o, por lo menos, con lo que estábamos escuchando hasta ese momento. De más estuvo el estreno de nuevas canciones que hicieron, ya que, sin ofender, la vigencia de Joan jett ya no es la misma, pese a lo hecho con The Runaways y The Balckhearts. Prueba de eso fue el hecho de que, si bien, ella se encontraba en uno de los escenarios principales, mucha gente decidió ir a ver a los argentinos de Illya Kuryaki and The Valderramas. El dúo, formado por Dante Spinetta y Emanuel Horvilleur entregó clásicos como “Chaco”, “Jaguar House”, “Coolo” y “Abarajame”, haciendo que el escenario de menor capacidad que los principales, se viera desbordado. La mezcla de estilos y una propuesta original hicieron que muchos se decidan por ellos, por encima de Joan Jett.
Probablemente MGMT haya sido una de las bandas más esperadas por el celebrado álbum debut Oracular Spectacular, que los puso en lo alto de la música. En un show redondo, colmado por fans, que incluía a miembros de TV on the Radio y Foster the People, que disfrutaban del show que daban los genios de Andrew VanWyngarden y Ben Goldwasser. Un show que fue un viaje musical con elementos psicodélicos, que tuvo, obviamente sus puntos altos, con “Time to Pretend”, “Electric Feel”, y el himno de una generación: “Kids”. Escuchar estas canciones en vivo las redefine y las hace aún más grandes. El sentimiento que generan fue similar a lo que The Flamming Lips generó el año pasado. También tocaron canciones de Congratulations y lograron cautivar al público.
Finalmente llegó la hora del plato fuerte, de terminar con la espera y poder finalmente, tener por vez primera a Foo Fighters en Latinoamérica. Dave Grohl, Taylor Hawkins, Nate Mendel, Chris Shiflett y Pat Smear dieron uno de los mejores conciertos que vi en mi vida. Ni bien la banda se asomó al escenario, la gente estalló. Grohl apareció en medio de la pasarela, a pocos metros de mi y “All My Life” más fuerte que nunca, fue el inicio de la locura. Le siguieron “The Pretender” y “Rope”, que mostraron en la excelente forma que se encuentran los Foo, carismáticos y llenos de energía. Emocionaron con “My Hero” y “Learn to Fly”, Dave Grohl se disculpaba por recién poder venir a Sudamérica después de tantos años. Tocaron en un show que duró dos horas y 45 minutos, no faltó ni un solo tema, inclusive los nuevos clásicos del aclamado Wasting Lights, fueron coreados por un público efervescente como si fueran clásicos de años. Este fue el caso de “Walk” y de “These Days”, canción que el mismo Grohl calificó como la mejor que haya escrito en su carrera. Hawkings se encargó de agradecer a Perry Farrell por haber cambiado el mundo con Lollapalooza, al mismo tiempo, Grohl recordó que en 1991 él y Kurt Cobain habían ido al primer Lollapalooza. En “Monkey Wrench” Grohl subió a una pequeña niña al escenario y la puso en sus hombros, para sorpresa de todos, hizo también subir al padre de la niña y los invitó a ver el resto del concierto al lado del escenario. El líder de los Foo impacta con su gracia y con la buena onda, riendo y arengando al público, el cual respondió de manera emocionante a cada canción, cantando y saltando.
El cierre estuvo marcado por el cover de Pink Floyd “In The Flesh” y la grandiose “Best of You”, gargantas partidas y una corta espera para que la banda volviera al escenario. Primero con Dave Grohl solista cantando “Wheels” y después toda la banda con “Times Like These”. Como invitada especial estuvo Joan Jet para “Bad Reputation”. Para un cierre real a todo volumen con la perfecta “Everlong” y la promesa de volver.
Quién diría que el baterista de Nirvana iba a convertirse en uno de los músicos más importantes e influyentes del rock, que hoy por hoy, se codea con los grandes como Jimmy Page, Brian May y Paul McCartney. Que escribe su propia historia de la mano de los Foo Fighters.Ante Dave Grohl nos sacamos el sombrero, gracias por tanto rock n roll.
De esta manera finalizaba esta edición de Lollapalooza, como decía Pato hace un año “Lollapalooza llegó y es nuestro” y además de llegó para quedarse. Un festival lleno de momentos y canciones, de artistas y personas, que cada año irá mejorando y nos regalará eso que amamos, eso que nos permite seguir cada día, que nos alimenta, eso que nosotros conocemos como música. La promesa de Pienso Música es la de estar en cada edición de este magnífico festival y poder revivirlo con vos.
Por: Eze Escobar
Para leer la nota del día 1 de Lollapalooza 2012 haz click aquí
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